La zona sur de Honduras ofrece
una variedad de opciones turísticas que complementan
a la oferta de la costa norte. En esta zona, destaca el
Golfo de Fonseca, una enorme bahía compartida entre
El Salvador, Honduras y Nicaragua, que con sus verdes
y exhuberantes canales de manglares, playas de arena negra
y poblaciones históricas le darán la oportunidad
de conocer otro aspecto de Honduras. La ciudad más
grande de la zona es Choluteca, cabecera del departamento
con el mismo nombre, y la única ciudad grande del
país que está en la carretera panamericana.
Fundada como Villa de Jerez de Choluteca, esta ciudad
es una de las más históricas del país,
y ofrece al visitante el casco urbano colonial mejor
conservado en el territorio nacional. La zona del centro
de Choluteca, con su catedral, el parque central, la
casa de José Cecilio del Valle y muchas otras
estructuras dan un ambiente muy agradable a la ciudad.
Choluteca está bien comunicada tanto con el resto
del país como con Centroamerica, debido a que
está en la carretera panamericana. Al norte se
encuentra Tegucigalpa a menos de dos horas de carretera,
la frontera de Amatillo con El Salvador se encuentra
hacia el occidente, y las fronteras de Las Manos, El
Espino y Guasaule hacia el oriente con Nicaragua.
El clima del sur es cálido y seco, contrastando
con la gran humedad de la costa norte. Sin embargo,
la hospitalidad hondureña que se ofrece al turista
y visitante es la misma en todo el país. Los
empresarios y ciudadanos del sur del país, y
de Choluteca en particular están convencidos
de que el turismo puede ser un importante generador
de trabajo y divisas, y por lo tanto están realizando
esfuerzos importantes para consolidar la infraestructura
ya existente, así como desarrollar nuevos hoteles.
Siendo un importante centro comercial, Choluteca y la
zona sur ofrecen al visitante una gran variedad de hoteles,
entre los que destacan El Hotel Oasis Colonial en Jícaro
Galán y el Hacienda Gualiqueme en Choluteca.
Otros hoteles de buena calidad son el Centroamérica,
La Fuente, el Camino Real (que no tiene ninguna conexión
con los hoteles Camino Real de lujo) y el Hotel Pierre.
Existen, además, una variedad de bancos, y la
principal actividad comercial es producto de la gandería,
la cría de camarones y la pesca.
A corta distancia se encuentra el puerto de San Lorenzo,
el principal puerto de Honduras en el pacífico.
Todos los productos de importación que llegan
al país por el Atlántico entran por este
puerto. El Golfo de Fonseca tiene una serie de pequeñas
islas a lo largo de su extensión, las cuales
se pueden ver fácilmente desde la costa. Sobresale
la Isla del Tigre por su forma cónica casi perfecta.
Dicha isla, cuyo nombre fue obtenido por los "tigres"
que antaño rondaban la isla, tiene un puerto
pequeño y muy pintoresco: Amapala, antiguo puerto
principal del país que durante anos fue el único
que operó en el Pacífico. Una gran cantidad
de personas importantes llegaron a Honduras a través
de este bello puerto. Amapala perdió el impulso
que tenía cuando el gobierno central mudó
el puerto a San Lorenzo, por considerar más conveniente
tenerlo directamente en la costa y no en una isla, desde
donde se tenía que volver a embarcar toda la
mercancía para llegar a la costa. Lo que antaóo
fuera una población muy activa y bulliciosa,
con un gran auge comercial, se ha convertido en un pequeño
y muy callado poblado que hoy lucha por mantenerse adelante.
Aunque la población luce un poco descuidada,
es fácil ver la majestuosidad que en el pasado
tuvo, gracias a sus grandes edificios públicos
construidos. Aún cuando en Amapala solo existen
un par de hospedajes, si existen algunos hoteles en
la isla. El mejor de todos es sin lugar a dudas el Hotel
Playa Negra, ubicado en la playa del mismo nombre. Este
hotel tiene además de habitaciones con aire acondicionado,
una piscina y un restaurante bar.
Es relativamente sencillo llegar a la isla, para ello,
hay que tomar el desíio a Coyolito que está
sobre la carretera panamericana. Una vez en Coyolito,
una pequeña población pesquera a orillas
del Golfo de Fonseca, usted puede tomar una embarcación
para que lo lleve a la Isla del Tigre, un paseo de unos
8 a 10 minutos a través de las plácidas
aguas de la bahía. Durante la travesía,
podrá observar algunas de las casas de los "ricos
y famosos" de Honduras, muchos de los cuales han
construido sus casas de playa en la zona de Coyolito.
Para aquellos que estén dipuestos a salir a
caminar bajo el sol, hay un camino que lo lleva a la
cima de la isla, desde donde podrá gozar de un
vista espectacular que incluye territorio Hondureño,
Salvadoreño y Nicaraguense.
Otra zona popular en el sur son las playas de Cendeño.
Visitadas frecuentemente por bañistas capitalinos,
especialmente durante los feriados de semana santa y
fin de año. Aquí, la arena, de origen
volcónico, es totalmente negra, dandole una singular
belleza pero alcanzando altas temperaturas bajo los
rayos solares, lo cual hace indispensable utilizar sandalias
para caminar por la playa. En Cendeño hay una
multitud de restaurantes y champas donde puede comer
o combrar bebidas.
La mayor parte de la costa del golfo esta conformada
por manglares, formando canales exóticos y un
medio ideal para las aves marinas. El refugio de vida
silvestre Bahía De Chismuyo, ubicada al occidente
de Coyolito es una zona protegida única en Honduras.
Es fácilmente accesible desde Coyolito.